«Vine a terminar con los odiadores seriales», dijo el Presidente en el Día de la Independencia
Acompañado por gobernadores, empresarios y sindicalistas, Fernández destacó la «unidad» entre el Gobierno nacional y los mandatarios provinciales para enfrentar la pandemia de coronavirus, y enfatizó que «todos estuvimos de acuerdo en que había que preservar la salud y la vida de la gente».
«Ninguna sociedad concreta su destino en el medio de insultos, divisiones y fundamentalmente teniendo al odio como común denominador. Yo vine aquí a terminar con los odiadores seriales», puntualizó el Presidente, al encabezar en forma virtual el acto central por el 204º Aniversario de la Declaración de la Independencia.
Por teleconferencia, lo acompañaron los 24 mandatarios provinciales -cada uno desde sus provincias- y un grupo representativo del empresariado y la CGT, presentes en la residencia de Olivos.
«Vine aquí a abrir los brazos para que todos nos unamos en busca de ese destino común. No vengo a instar un discurso único, sé que hay diversidad y la propicio, de todo tipo, género e ideológica. La celebro, no me afecta, lo que necesito sí es que sea llevada adelante con responsabilidad», aseguró el jefe de Estado en su discurso.
En sintonía, Fernández apuntó que la responsabilidad «primera es no mentir, decir la verdad y respetarnos» y añadió; «El primero que quiere eso es el Presidente y es otra vez el compromiso que asumo con ustedes».
En cuanto a la pandemia, Fernandez rescató que, en momentos en que «ponía en jaque» a la región, en el país «todos estuvimos de acuerdo en que había que preservar la vida de la gente, desde Jujuy a Tierra del Fuego, y desde Mendoza a la provincia de Buenas Aires».
«Absolutamente todos entendimos que no había un dilema, que no había disyuntiva, que había que preservar la vida y la salud de la gente», remarcó el Presidente y defendió la medida del aislamiento social para, mientras tanto, poder «mejorar el sistema de salud que estaba muy golpeado, para que ningún argentino se quede sin atención sanitaria».
«Todos actúan prontamente y nadie pregunta de qué partido viene, solo preguntamos cómo te ayudo, todos», remarcó el mandatario, quien exhortó a «pasar este momento siempre siendo solidarios».
En otro tramo del discurso, dijo que «ya estamos empezando a reconstruir la Argentina» y señaló a los dirigentes que lo acompañaban, representantes de la producción, la industria, los servicios y el sector gremial.
A su lado estaban, guardado la distancia social como exige el protocolo por el coronavirus, Miguel Acevedo y Carolina Castro, de la UIA; Héctor Daer, de la CGT; Adelmo Gabbi por la Bolsa de Comercio; Eduardo Euernekian, por la Cámara de Comercio y Servicios; Javier Bolzico, de la Asociación de Bancos Argentinos; Néstor Szcech, de la Cámara Argentina de la Construcción; y Daniel Pellegrina, de la Sociedad Rural Argentina.
Al convocar a construir la «Argentina del mañana», el Presidente sostuvo que «el odio y la división nos dejó en el lugar que nos quedamos, nos posterga y nos paraliza y nos pone en el peor lugar como seres humanos».
«Ya estamos trabajando con todos los que están aquí y en ese futuro los que trabajan tienen un rol central. Han hecho un enorme esfuerzo y lo valoro mucho lo que han hecho los hombres del sindicalismo por sobrellevar este presente», dijo y agradeció al sindicalismo por «haber entendido la fragilidad de este tiempo».
Asimismo, indicó que «no es verdad que no tengamos futuro y menos cierto es que no tengamos ideas» y agregó: «Este presente no permitió ver las cosas en su real dimensión y ya tenemos mucho más claro por qué nos pasaron cosas y por qué no podemos volver a repetir errores que cometimos en el pasado».
Al inicio de su exposición, Fernández -con una pantalla detrás que mostraba imágenes de todos los mandatarios desde sus provincias- dijo: «Prometí que el Gobierno iba a ser de un Presidente y de 24 gobernadores, que están hoy junto a mí unidos y trabajando para enfrentar lo que nos toca vivir»; y luego, nombró y agradeció a cada uno.
Al jefe de Gobierno porteño, Rodríguez Larreta, uno de los principales dirigentes de la oposición, lo distinguió con un «amigo Horacio», al mencionarlo.
En su discurso, Fernández recordó también a la fallecida cantante popular Mercedes Sosa, cuya voz se escuchó al inicio del acto en las estrofas del Himno Nacional, y puso de relieve que «sufrió las desventuras de la Argentina».
«Era tucumana, del mismo lugar donde la patria gritó su independencia», remarcó, y anunció que «a partir de hoy radio Nacional Tucumán volverá a llamarse radio Mercedes Sosa».
Previo a su mensaje, Fernández dio la palabra al gobernador José Manzur, desde la Casa Histórica de Tucumán, donde se proclamó la Declaración de Independencia el 9 de julio de 1816, y luego se emitió un video para recordar el acta de la Declaración de Independencia, leída por niños de todas las provincias.
En su discurso, Manzur expresó que el jefe del Estado el 10 de diciembre recibió el «país en terapia intensiva y lo agarró la pandemia» y concluyó: «Nos sentimos orgullos y confiamos en nuestro Presidente». (TELAM)