Talleres goleó a Central Córdoba y es líder
Menos de diez minutos le alcanzaron a Talleres para abrir el marcador en el partido correspondiente a la cuarta fecha de la Liga Profesional ante Central Córdoba de Santiago del Estero. Una mala salida defensiva del conjunto del norte le permitió a Gastón Benavidez proyectarse en ataque y abastecer a Bruno Barticciotto, quien capitalizó el desorden de la última línea local para establecer el 1 a 0.
Sin embargo, cuando los reclamos de los hinchas locales se hicieron sentir y los insultos iban dirigidos a sus propios jugadores, en el Madre de Ciudades Tomás Molina silenció a los espectadores con el gol del empate. Fue unos instantes previos al descanso. Y cuando parecía que la situación se calmaba, el VAR intervino para informar una mano del delantero que anuló su conquista. Sin Ley del Ex, todo parecía indicar que los de Lucas González se iban a ir al vestuario en desventaja.
Dicen que el fútbol siempre da revancha. Y Tomás Molina la tuvo en el tercer minuto adicional. Fue a través de otra pelota que sentenció otra Máxima que está instalada en el deporte más popular del planeta: la que dice que Dos cabezazos en el área terminan en gol. La aparición de Rodrigo Atencio por el primer palo desarticuló a la defensa de La T y el joven con pasado en el elenco cordobés selló el 1 a 1 con el respetuoso silencio hacia el escudo de su pasado. La repartición de puntos no conformaba a ninguno, y la segunda etapa prometía más emociones.
En el entretiempo Walter Ribonetto volvió a ajustar las tuercas de un equipo que parecía demasiado confiado. Y en la reanudación del pleito Bruno Barticciotto volvió a poner a Talleres en ventaja. El chileno se asoció con Marcos Portillo y la jugada continuó con la proyección ofensiva de Matías Catalán. La pared que construyó Gastón Benavidez volvió a aplicar la fórmula inicial para que el lateral asista al goleador: 2 a 1.
Con la exquisita pegada de Marcos Portillo, La T extendió la diferencia para empezar a liquidar el pleito, aunque la vergüenza deportiva de Central Córdoba mantuvo al Ferroviario en partido. Otra vez, Tomás Molina quebró la resistencia de Guido Herrera y recortó distancias para que el cierre sea a puro suspenso. Con el 3 a 2, cualquier cosa podía pasar en las instancias decisivas de la noche santiagueña.
La esperanza de los fanáticos del norte se desvaneció cuando Gustavo Albarracín le puso cifras definitivas al triunfo de la visita. El reemplazante de Matías Galarza tuvo su debut soñado al interpretar una obra magnífica que se colgó del ángulo de Luis Ingolotti. Un golazo que selló el 4 a 2 para que Talleres se trepe a la punta y comparta la cima con Racing, el otro líder del torneo doméstico.
